La plaza de la Constitución ha sido el centro neurálgico de la vida malagueña desde los tiempos de la reconquista, en la que se denominaba plaza de las Cuatro Calles. También ha tenido otros nombres como plaza Mayor hasta que en 1812 pasa a llamarse de la Constitución.
Aquí han estado ubicados el Ayuntamiento de Málaga hasta 1869, la Casa del Corregidor, la cárcel, la Audiencia, el convento de las Agustinas, incluso otros puntos de interés turístico como la Sociedad Económica de Amigos del País.
En uno de sus laterales, para no obstaculizar la celebración de todo tipo de actos, se encuentra la Fuente de Génova. Casetas de la Feria de Málaga, la tribuna de las autoridades en la Semana Santa son algunos de los grandes actos que sigue acogiendo esta céntrica plaza malagueña.
En 2003 se peatonalizó junto a la calle principal de la ciudad, la Calle Larios, que desemboca en esta plaza, uno de los sitios recomendados para comenzar su paseo a pie por el Centro Histórico de Málaga.
Fuente de Génova
Fuente de mármol del siglo XVI de estilo renacentista y autor anónimo de la que se cree pudo ser esculpida en Génova. Actualmente está ubicada en la Plaza de la Constitución, donde originariamente se instaló, aunque ha pasado por diferentes ubicaciones como la Alameda o el Parque hasta la remodelación de la plaza en 2003, cuando finalmente se instala en un lateral de la misma. También ha recibido otro nombre como Fuente de Carlos V, quien ordenó su instalación en la ciudad.
Su taza principal es de 12 lados con caras con adornos de tipo jónico y separándolas en sus vértices telas que se sostienen sobre rosas de cuatro pétalos. En el centro de la fuente se puede observa el vástago que está dividido en varios cuerpos.
En su base hay tres sirenas con cola bífida que unen sus manos con coronas de flores. En el siguiente cuerpo tres figuras femeninas parcialmente cubiertas por un paño a las que acompañan delfines.
En la parte superior está ubicada una segunda taza de la que caen 8 caños de agua y sobre el que descansan tres figuras entre las que destaca Neptuno con un tridente acompañado de un delfín. Tras una última taza se levanta el remate formado por tres niños y coronando la fuente un águila que surte agua a través de su pico.
La fuente de Génova llegó a Málaga aproximadamente en 1550, tiene una historia que podemos llamar romántica, fue rescatada por Bernardino de Mendoza de manos de unos piratas turcos capitaneados por Barbarroja que a su vez la había capturado cuando venía hacía Málaga. Por orden del emperador Carlos V se dividió la fuente en dos partes por considerarla grande, mandando la parte inferior a Úbeda y quedando en Málaga la parte superior con el águila incluida.